La Coordinadora de ONGD de Málaga y varias asociaciones de estudiantes reclama a la Universidad de Málaga la ruptura de todos los acuerdos de cooperación con Israel
Las organizaciones firmantes consideran lamentable y desafortunada la
firma de un convenio marco de colaboración el pasado 18 de julio entre la
Universidad de Málaga y la Universidad de Tel Aviv en el mismo momento en que
las bombas israelíes mataban a cientos de universitarios en Gaza.
La Coordinadora de ONGD de Málaga, Málaga Solidaria, de la que
forman parte más de 30 organizaciones sociales y oenegés y varias asociaciones
de estudiantes de la UMA, considera lamentable y equivocada la decisión de
profundizar la cooperación universitaria con Israel y solicita a la Universidad
de Málaga la ruptura inmediata de todos los acuerdos de cooperación
universitaria firmados con instituciones israelíes.
La firma, que se produjo el pasado 18 de julio en el rectorado
de la UMA, llegó en un momento muy
desafortunado y provocó gran indignación entre la ciudadanía malagueña y las
organizaciones de solidaridad, ya que supuso un espaldarazo a Israel en el
mismo momento en el que la sociedad civil palestina pedían avanzar en el
aislamiento internacional y el boicot académico e institucional del Apartheid israelí.
La rúbrica de este acuerdo de cooperación, protagonizada por la Rectora de la UMA, Adelaida de la
Calle y el presidente de las universidades israelíes, Joseph Klafter,
en presencia del cónsul israelí en Andalucía, Raphael Cohen, llega en un
momento en el que desde varios departamentos universitarios y asociaciones
estudiantiles de la UMA comienzan a trabajar en la campaña de Boicot Académico
y Cultural.
Esta campaña es una de las más importantes de estas
características a nivel estatal y europeo con más de 2000 firmas entre
catedráticos, profesorado, investigadores, alumnado y organizaciones
universitarias, muchas de ellas de Málaga, y que piden el cese inmediato de la
cooperación universitaria e investigación con Israel. Este llamamiento, que surge de las
universidades y la sociedad civil palestina, denuncia la normalización de un
Estado que promueve el Apartheid, como ocurrió en Sudáfrica. La adopción de
esta estrategia pacífica responde a la misma necesidad: El aislamiento
internacional y el boicot institucional en todos los ámbitos, sobre todo, en el
académico.
El acto se produjo en el mismo edificio y en el mismo momento
en el que se cerraba un curso promovido por la ONG Amnistía Internacional y que
en su cierre condenó la agresión israelí sobre la Franja de Gaza. Justo al
mismo tiempo de la firma, decenas de palestinos, muchos de ellos niños y
universitarios gazatíes estaban siendo bombardeados. Mientras, estudiantes, ONG
y representantes de la sociedad civil reclamaban en la plaza de la
Constitución, para la masacre y el boicot global a Israel.
Hoy sabemos que la segunda universidad israelí con la que la
UMA tiene firmado un convenio similar es un laboratorio de las políticas
coloniales israelíes. La Universidad Bar Ilan, una institución fundamentalista
judía situada en un suburbio de Tel Aviv[1], sirve de apoyo académico
a la inteligencia militar israelí. El pasado 21 de julio, el Dr. Mordejai Keidar, profesor de ésta universidad,
declaró que violar a las esposas y madres de combatientes palestinos disuadiría
ataques. La Universidad, lejos de condenar dichas palabras, apoya
las tesis de Keidar y ha salido en su defensa.
Por otra parte, la universidad de Tel Aviv, objeto del última
rúbrica, emitió
un comunicado el pasado 24 de julio, en el que mostraba su apoyo a los soldados
y estudiantes reservistas destinados a Gaza y a los que premiaría con
“becas y ayudas económicas”. El mismo
rector de la Universidad hebrea, Joseph Klafter, expresó su
"agradecimiento" a los estudiantes que participan en la masacre de
Gaza, y dijo que "la Universidad de Tel Aviv ha contribuido y seguirá
contribuyendo en gran medida a la seguridad nacional."
Pero eso no es todo. El director de la asociación juvenil
árabe-israelí Baladna,Nadim Nashif, subrayó que existe " una caza de
brujas contra los estudiantes palestinos [que son ciudadanos de Israel] y otros
que están publicando en las redes sociales en contra del ataque sobre
Gaza".
Así, desde las organizaciones firmantes queremos mostrar
nuestro rechazo frontal a la firma de convenios con universidades israelíes en
respuesta a la petición de solidaridad de la sociedad civil palestina a
articular una respuesta sobre la base de la campaña BDS (Boicot, Desinversión y
Sanciones). Es por ello que le solicitamos a la Universidad de Málaga y a su
rectora, Adelaida de la Calle, que deje al apartheid fuera de las aulas malagueñas
y la ruptura de los convenios establecidos con Universidades e instituciones
israelíes y el firme compromiso de apoyar el boicot académico mientras el
Estado de Israel siga manteniendo el sistema de Apartheid y actuando contra los
derechos humanos y el derecho internacional.
Firmado:
Coordinadora
de ONGDs Málaga Solidaria
Asociación
Foro de Estudiantes de Derecho y Criminología
Asociación
de Estudiantes Terapia Ocupacional de Málaga
Alumnado
por la Pública
[1]
En noviembre de 1995, Yigal Amir, un estudiante de la
institución, asesinó al primer ministro israelí Isaac Rabin.
No hay comentarios:
Publicar un comentario